El invierno blanco ha llegado a Noruega. Un paisaje de cuento de hadas

En Beitostølen, la nieve ya se asentó en las primeras horas de la mañana. En otras localidades, como Tonsåsen y Vingromsåsen, las precipitaciones también fueron visibles y parte de las carreteras quedaron cubiertas por una fina capa de nieve.

El tráfico rodado transcurrió sin mayores contratiempos y los conductores actuaron con precaución. En la meseta de Lygna, esta vez no se registró nieve, lo que confirma la gran variabilidad de las condiciones meteorológicas locales.

Los meteorólogos señalan que, aunque la nieve ha aparecido relativamente temprano, esto no significa aún la llegada permanente del invierno. Las temperaturas en la región podrían volver a subir en los próximos días y la capa blanca podría desaparecer de la superficie.

En el pasado, episodios similares de nieve ya se han producido en octubre, pero no han durado mucho. Sin embargo, las observaciones indican que en las zonas más altas de las montañas la capa de nieve puede durar más tiempo, lo que alegra a los aficionados al esquí.

Las autoridades locales recuerdan a los conductores la obligación de adaptar la velocidad a las condiciones de la carretera y la necesidad de cambiar a neumáticos de invierno en las próximas semanas. En Beitostølen ya ha comenzado la limpieza de las principales calles para garantizar la seguridad de residentes y turistas.

La mayoría de las carreteras siguen siendo transitables, aunque en las zonas montañosas puede estar resbaladizo, especialmente durante la noche. En varios lugares de las rutas hacia Dokka se ha observado una fina capa de hielo.